Estatal

TIJUANA.- A sus 90 años de edad, don Elevi Bernal, un residente de la colonia Lázaro Cárdenas, estuvo a punto de ser víctima de un despojo de su predio por turbias maniobras de un individuo, lo cual fue evitado a tiempo por el gobernador de Baja California, Jaime Bonilla Valdez.

Este hecho lo agradeció personalmente, muy emocionado, al jefe del Ejecutivo estatal, para lo cual acudió acompañado de familiares hasta la recepción de la planta baja del edificio de la Gubernatura en el Centro de Gobierno (IMOS), a donde el gobernante llegó en un gesto de humildad y respeto.

En muestra de gratitud, don Elevi le expresó: “Personas como usted, a nivel de gobernantes, son muy escasas y hacen mucha falta para defender al pueblo de las injusticias y los abusos a los que está expuesto, por lo que espero que llegue a ser el siguiente presidente de nuestro México”.

Sobre el antecedente del caso, don Elevi recibió la asesoría y el apoyo personal de don José Alvarado, activista social y amigo personal, quien llevó este asunto ante el jefe del Ejecutivo estatal para que el INDIVI (Instituto para el Desarrollo Inmobiliario y de la Vivienda de Baja California) suspendiera el trámite que favorecería al identificado como Darío Vélez Ávila.

La trama puesta en práctica ventajosamente, consistió en que ofreció comprarle el terreno en una determinada suma, para lo cual llevó a don Elevi a una sucursal bancaria y abrió una cuenta en la que depositó 200 mil pesos, pero se acreditó como beneficiario; luego promovió los trámites en diferentes dependencias y ante el INDIVI para obtener el título como legal posesionario.

Expusieron al gobernador Bonilla Valdez que, “cuando ya estaba por obtener el documento expedido por el INDIVI, Darío acudió al banco y transfirió a una cuenta personal la suma que había depositado como ´enganche´, de manera que dejaría a don Elevi sin terreno y sin dinero”.