Tijuana

TIJUANA.- Adrián Briseño de 68 años de edad, originario de Ciudad Obregón, desde muy joven salió de su casa para probar suerte a los Estados Unidos, donde dijo tocaría su música, no obstante después de un tiempo el destino lo trajo a Tijuana.

En una breve charla con el reportero de casa, el músico reveló que por varios años se mantuvo "rockandoleando" como baterista de una banda local y que también lo hizo en grupos norteño y hasta con banda.

Pero llegó la pandemia, ante ello no logró recuperar su trabajo, señaló algo triste, además de que, por su edad y condición física se volvió más difícil le dieran oportunidad, por eso un día tomó su guitarra, algo "vieja", un micrófono y unas bocinas que tenía guardadas, para salir a cantar en las calles del centro de Tijuana; "canto feo pero con sentimiento", expresó.

Adrián, lleva tres años tocando en las calles, desde baladas viejitas, canciones de Juan Gabriel o Vicente Fernández, sin embargo lo que más le apasiona es el jazz y tocar la batería, pero lamentablemente no cuenta con los instrumentos ni un lugar para hacerlo, además de que para sus 68 años ya es muy complicado.

Mostró un bulto que sobresale de su cuello, presuntamente los doctores le han dicho que podría ser un tumor, pero no cuenta con el recurso suficiente para poder atenderse y hacerse la cirugía, tampoco cuenta con familiares que lo puedan apoyar.

Aunque no siente dolor, Adrián espera un día juntar lo suficiente para poder atenderse, ya que le preocupa pueda afectarle gravemente a su salud y le impida seguir trabajando.

A pesar de las dificultades a las que se enfrenta, Adrián sale casi todos los días a la avenida Revolución o en una esquina ubicada en la calle 5ta y avenida Constitución para salir adelante, conseguir unas cuantas monedas para comer y pagar su renta.

"Tengo que comer, tengo que pagar renta, pago 1500 de alquiler, para unos puede que sea poco, pero para mí es mucho, el dinero es necesario por eso salgo todos los días a enfrentar lo que me resta de vida", terminó diciendo el amante de la música.

Fotos: Luis Bautista/Border Zoom