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Los ríos Oxolotán, Amatán, Teapa y Pichucalco superaron sus niveles máximos, inundando comunidades enteras y causando deslaves en carreteras. En Jalapa, se reportaron encharcamientos en la cabecera municipal y la carretera Villahermosa-Teapa presentó vados que limitan la circulación a vehículos pesados. En Tapijulapa, Pueblo Mágico de Tacotalpa, el desbordamiento de los ríos Oxolotán y Amatán dejó severas afectaciones a la población y viviendas.

Ante la situación, la Secretaría de la Defensa Nacional activó el Plan DN-III-E para apoyar a los habitantes afectados. Se instalaron albergues temporales en Jalapa para resguardar a las familias desplazadas, mientras las autoridades continúan evaluando los daños en infraestructura y accesos carreteros.

Aunque hasta el momento no se han reportado víctimas mortales, la población fue exhortada a mantenerse alerta ante posibles nuevas lluvias y desbordamientos, y a seguir las indicaciones de las autoridades locales.

Las autoridades locales y estatales trabajan de manera coordinada para garantizar la seguridad de los habitantes y mitigar los efectos de las inundaciones, que se suman a los desafíos climáticos que enfrenta la región.