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Porque el resto del camino, el as en ciernes de los Mariners, que fue ascendido un día explícitamente para este enfrentamiento de mayor riesgo, fue intocable.

Woo completó la séptima entrada superando al as de los Padres, Michael King, y con el apoyo de tres carreras de la ofensiva en la cuarta entrada, que conectó cinco hits consecutivos con dos outs para representar la mayor parte de su producción.

Y con una victoria de 6-1 en Petco Park, los Mariners aseguraron su segunda barrida de al menos tres juegos en 2025 y comenzaron uno de sus viajes más largos como visitantes con una nota imponente, frente a multitudes que llenaron todo el fin de semana y contra un equipo de los Padres que ha sido uno de los mejores de la MLB.

King fue el último abridor de alto calibre al que se enfrentaron los Mariners y al que terminaron ganándole el juego, junto con Max Fried, Tarik Skubal, Garrett Crochet, Hunter Brown, Nathan Eovaldi y Jacob deGrom.

Pero al igual que Woo, King estuvo en control desde el principio, manteniendo a Seattle sin hits con una base por bolas hasta la tercera entrada, antes de que los Marineros parecieran tener una mejor lectura de su versátil mezcla de lanzamientos la segunda vez en la alineación.