The Border

La madre del estudiante de 14 años sospechoso de abrir fuego en una escuela secundaria de Georgia la semana pasada, matando a cuatro personas y hiriendo a otras nueve, se disculpó por las acciones de su hijo en una nueva carta el miércoles, pero insistió en que “no es un monstruo”, informó CNN .

Datos clave

Marcee Gray, la madre de Colt Gray, el estudiante sospechoso de matar a cuatro personas en la escuela secundaria Apalachee la semana pasada, escribió en una carta abierta dirigida a los padres y familiares de los afectados: “Lo siento mucho desde el fondo de mi corazón”, y agregó: “Personalmente, nunca me perdonaré por lo que ha sucedido”.

“Mi hijo Colt no es un monstruo”, continuó en la carta, que fue reportada primero por CNN, y pidió a la gente que “ore por él y el resto de nuestra familia, como yo estoy rezando por todos ustedes cada momento de cada día”.

Se informó anteriormente que Marcee Gray recibió un mensaje de texto de su hijo la mañana del tiroteo que decía “Lo siento, mamá”, y que llamó a la escuela para advertir sobre una “emergencia extrema” unos 30 minutos antes de que la policía respondiera al tiroteo.

Colt Gray ha sido acusado como adulto de cuatro cargos de homicidio grave relacionados con un tiroteo en la escuela el miércoles pasado en Apalachee High School en Winder, Georgia. Cuatro personas, dos estudiantes y dos profesores, murieron en el tiroteo, y el sospechoso de 14 años fue detenido en el lugar después de entregarse a la policía. En la semana transcurrida desde el tiroteo, ha surgido información sobre amenazas pasadas de tiroteos en la escuela de las que Gray había sido acusado, y al menos un miembro de la familia le dijo a The Washington Post que había luchado con la salud mental.

Tangente

El padre de Gray, Colin Gray, también fue acusado de cuatro cargos de homicidio involuntario, dos cargos de asesinato en segundo grado y ocho cargos de crueldad hacia los niños, según la Oficina de Investigaciones de Georgia . Los cargos se presentaron después de que Colin Gray les dijera a los funcionarios que le había comprado a su hijo el arma utilizada en el tiroteo como regalo. Los cargos son algunos de los más graves presentados contra un padre de un presunto tirador escolar, y se producen meses después de que Jennifer y James Crumbley fueran sentenciados a entre 10 y 15 años de prisión por homicidio involuntario después de comprarle a su hijo, quien mató a cuatro estudiantes en una escuela secundaria de Michigan en 2021, un arma como regalo a pesar de las señales de advertencia sobre su salud mental.

-Con información de Forbes