Tijuana

TIJUANA.- Recientemente, los vecinos de la calle Mazatlán en el fraccionamiento Magaña, contiguo a la 5 y 10, denunciaron una problemática vial derivada de unas piedras que fueron colocadas a un costado de la banqueta en un espacio de la vía pública para estacionarse.

Los residentes de la estrecha vialidad refieren que desde hace 6 meses, los taxistas de la zona han puesto las rocas para evitar que particulares ocupen esos espacios y puedan colocar sus unidades del transporte público, incluso donde ya no es zona de lanzadera.

“Ahí se detiene el tráfico, yo creo que las ponen para que no se ‘parkeen’ ahí pero es vía pública, no entiendo para que las ponen. Yo creo que la vía pública es de todos, entonces no se debería hacer eso de apartar lugares”, opinó el vecino Alfonso Rodríguez.

Al no haber ningún señalamiento que indique ese tramo de la banqueta como zona de lanzadera o con alguna prohibición para estacionarse, el punto 5 del artículo 122 Bis del Reglamento Municipal de Tránsito señala lo siguiente:

“Al que sin estar facultado coloque cualquier tipo de señalamiento, instrumento u objeto en la vía pública obstruyendo el uso de la misma al público en general será sancionado con diez UMAS, además de que deberá retirar los obstáculos por su cuenta y en caso de resistencia el retiro lo hará la fuerza pública con cargo al infractor”.

En ese sentido, la Dirección de Policía y Tránsito Municipal está facultada para dialogar y/o sancionar a los responsables, y en dado caso, optar por la instalación de estacionómetros en la vialidad.

Por otra parte, el señor Hernández expuso que en esta calle, también es un problema que no se respete el único sentido original de circulación, ya que actualmente hay quienes circulan en sentido contrario sin problema. Esto, aunado al tránsito de camiones de excesivas dimensiones ha ocasionado daños en la carrocería de su automóvil.

"En esta esquina había un letrero de que no podías entrar de aquí para allá, pero de todos modos no hace caso la gente", lamentó.