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La gimnasta rumana Ana Barbosu recibió en Bucarest su medalla de bronce de la prueba individual de suelo de los Juegos de París, que tras una polémica apelación en el puntaje, se había concedido a la gimnasta estadunidense Jordan Chiles.

El pasado 5 de agosto, Jordan Chiles se subió al tercer escalón del podio, por detrás de la brasileña Rebeca Andrade, que ganó el oro y de la estrella estadunidense Simone Biles, que se quedó con la plata; esto en el evento de piso de la Gimnasia artística en los Juegos de París.

Barbosu consideró que había obtenido mejor nota, pero después de una reclamación por parte del equipo de gimnasia de la estadunidense, la nota de Chiles fue reevaluada al alza, lo que le permitió adelantar a la gimnasta rumana y subirse al podio.

Fue entonces cuando Rumanía acudió al Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), que determinó que la reclamación estadunidense se había realizado fuera de plazo y reatribuyó el tercer lugar a Barbosu.

La reclamación y fallo del TAS se dieron después de la prueba, por lo que la gimnasta rumana de 18 años no pudo recibir su medalla de bronce en París, sino que lo ha hecho ahora en Bucarest, donde dijo estar "muy feliz" por este logro.

Jordan Chiles había considerado "injusta" la retirada de su medalla y su federación nacional (USA Gymnastics) prometió "explorar todas las vías y procedimientos de recurso posibles" para que su deportista recupere ese bronce en disputa.

Con información de Excélsior