Noticias de Tijuana. El Gran Diario Regional en línea, presentando noticias en tiempo real con información de Tijuana, Mexicali, Ensenada, Rosarito, Tecate, Baja California, México y el mundo
En Tendencia: Jaime Bonilla, AMLO, Marina Del Pilar, Policiaca Tijuana, Garita Tijuana, UABC, Pandemia, COVID, Xolos, Toros
Falta de documentación impide que solicitantes de asilo humanitario trabajen en la formalidad
Por Sergio Carrillo | jueves, 16 de octubre de 2025
Autoridades indicaron que en 2024, era un porcentaje menor el de personas refugiadas laborando en la formalidad, debido a que el Inami no ha entregado la tarjeta de residente por razones humanitarias.
TIJUANA.- En Baja California hay alrededor de 18 mil personas solicitantes de asilo y refugiadas, estimó René Argüelles, Asociado de Soluciones Duraderas de la oficina de ACNUR en Baja California.
Refirió que, en 2024, el 64% de las personas refugiadas en la entidad estaban ocupadas en alguna actividad económica. Sin embargo, de ese porcentaje, sólo el 44% lo hacía bajo una modalidad formal, y explicó que la principal razón es la falta de documentación que les permita insertarse al mundo laboral en toda la regla.
“Uno de los principales retos que enfrenta la población no mexicana en Tijuana es que el Inami no está entregando la tarjeta de residente por razones humanitarias, lo que les impide tener documentos. Otros, además, están batallando para renovarla. En esos casos, los empleadores, que legalmente no pueden pagar en efectivo y deben hacerlo a través de sistemas bancarios, se enfrentan a un obstáculo, pues sin documentos no se puede acceder a una cuenta”, expuso.
Argüelles puntualizó que una vez que las personas son reconocidas como refugiadas por la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) acceden a la residencia permanente, y así pueden tramitar su RFC, su número de seguro social y demás documentación necesaria. Aclaró que el Instituto Nacional de Migración (Inami) emite una constancia para estas personas, pero ésta carece de validez oficial.
“Sí existe una constancia, pero las empresas a veces no la reconocen por temor. Las personas requieren la tarjeta de visitante por razones humanitarias o la residencia permanente para tramitar documentos como el RFC, que es indispensable para acceder al trabajo formal”, recalcó.
En ese sentido, compartió que “hace poco una organización nos comentó que tuvieron que recurrir a por lo menos 40 amparos, y es solo una de las que ayudan a personas no mexicanas, para lograr que el Instituto Nacional de Migración o la Comar les entreguen la tarjeta de visitante por razones humanitarias”.
Indicó que en el Centro Multiservicios de la colonia Castillo, donde la Acnur colabora con la Comar, el Proyecto Salesiano y los tres órdenes de gobierno, se han atendido a más de 15 mil personas durante 2025, superando las 13 mil del año pasado, a las cuales se les ha brindado apoyo legal, servicios de salud y empleo.
“Haití ha sido una de las principales nacionalidades que solicitan protección en Baja California. Otras nacionalidades, como Colombia, han ido en aumento. Centroamérica mantiene una presencia constante de solicitantes de asilo, y Venezuela y Cuba también han sido nacionalidades muy presentes en el estado”, comentó.
En sesión de socios de la Asociación de Recursos Humanos de la Industria de Tijuana AC (Arhitac), el representante de Acnur acudió a explicar que las personas ya declaradas como refugiadas, cuentan con documentación para trabajar formalmente en México, ya que en reiteradas ocasiones, las empresas asumen que una persona extranjera está en una situación irregular.
“Un mensaje que siempre buscamos transmitir es que las personas refugiadas y extranjeras también traen conocimientos y habilidades que enriquecen el entorno. Afortunadamente, de acuerdo con los sondeos que hemos hecho, Baja California no es percibida por las personas solicitantes de asilo y refugiadas como un lugar donde sean discriminadas”, subrayó.
Precisó que de una encuesta que realizaron, el 78% de las personas entrevistas refirieron no haberse sentido discriminadas en el estado, principalmente en Tijuana.